Pro-Peniel, Clase 4: “La Escalera de la Victoria”

Enseñarle a los discípulos a vivir una vida de victoria por medio de su vida de comunión con Cristo.

En verdad es posible tener la victoria en Cristo, pero muchas veces hay que pasar por un proceso antes de tener la victoria en nuestros problemas.

El proceso de la victoria requiere que nosotros tengamos:

La comunión con Dios es la base de nuestra victoria.
Jesús dijo en Juan 15:4-5 “Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.”
También dijo en Juan 15:7 “Si permanecéis en mi, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os sera hecho.”
Debemos tener comunión con Dios para que podamos escucharle, obedecerle y ser bendecidos, como lo dicen en Deuteronomio 28:1-2 “Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.”

La Comunión con Dios requiere:

Oración
Lectura bíblica
Vida devocional
Dedicación, como Dios se lo pidió a Josué en el libro de Josué 1:8 “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.”

Si tenemos comunión con Dios desarrollaremos convicciones de un Dios de milagros.
Muchas veces para obtener la victoria se requerirá el que estemos persuadidos de que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece.
Para desarrollar nuestro máximo potencial en Cristo debemos convencernos primero a nosotros mismos de que lo podemos lograr.
Si creemos que podemos tendremos razón, pero si creemos que no podemos también tendremos la razón.
La comunión con Dios nos dará: Fe, confianza y paciencia. Hebreos 11:1 nos enseña acerca de la fe “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”

A veces no basta con orar y con creer que podemos vencer, se necesita un cambio de naturaleza para poder tener la victoria.
El cobarde necesita cambiar a una naturaleza de valiente para que pueda enfrentar y vencer sus temores.
Hay personas que están convencidas que están haciendo algo mal, pero no se han arrepentido de lo malo que hacen. Ellos necesitan una conversión. La conversión es un milagro de parte de Dios en nuestras vidas.
Así como Jacob (El ladrón y suplantado) recibió un cambio de nombre, y se le puso Israel, que significa: El principe que prevalece. Así, también nosotros necesitamos un cambio de naturaleza.
Joel 2:12-14 “Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. ¿Quién sabe si volverá y se arrepentirá y dejará bendición tras de él, esto es, ofrenda y libación para Jehová vuestro Dios?”

Nuestra comunión con Dios traerá fe a nuestras vidas, lo cual también nos llevara a una genuina conversion a Dios, y así tendremos también la compasión que debemos tener por los demás, para que verdaderamente nos interesemos por su bienestar.
Cuando buscamos un sincero bienestar por los demás descubriremos que la compasión nos llevará a desarrollar nuestro máximo potencial en Cristo.
La victoria se encuentra escondida detrás de la compasión por los demás.
Así como Jesús siempre fue guiado por la compasión, así nosotros debemos seguir su ejemplo orando y sirviendo a los demás, lo cual al final nos dará siempre la victoria en nuestra familia, matrimonio y aun negocio.
Mateo 9:36-38 “Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.”

Si subimos por la escalera de la victoria descubriremos que en el ultimo escalón encontraremos muchas bendiciones de parte de Dios para nosotros.
Efesios 1:3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.”
De hecho Dios tiene mas que darnos que nosotros que pedirle, pero el esta esperando que nosotros tengamos comunión con El para que nos pueda guiar a toda verdad y a toda justicia.
También está esperando a que le creamos Hebreos 11:6 “Porque sin fe es imposible agradar a Dios.”
También quiere cambiar nuestra naturaleza, porque Dios da gracia a los humildes, pero mira de lejos a los altivos.
Y también espera que seamos misericordiosos y compasivos con los demás, porque el que perdona, él también será perdonado, y al que haga misericordia también recibirá misericordia, porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

Josué 1:8

La Catedral del Avivamiento